La entrevista: Joan y Carles de Òmnium Cultural

A raíz de la pandemia tuvimos que dejar de hacer actividades y decidimos ayudar a otras entidades de la ciudad para llevar a cabo sus acciones.

Joan Puente Massip, 62 años. Contable jubilado, vive en Badalona y es miembro de la Junta de Òmnium Cultural Barcelonès Nord.

Carlos Cervera Portillo, 53 años. Instalador electricista, es socio de Òmnium Cultural Barcelonès Nord.

Joan, hoy hablamos contigo como miembro de Òmnium Cultural. Para hacernos una idea, ¿nos puedes explicar cuando se creó la entidad y con qué objetivo?

Òmnium Cultural es una entidad sin ánimo de lucro que defiende los derechos civiles y las libertades de los catalanes. Desde hace más de 57 años, trabaja para fomentar la lengua catalana, la cohesión social, la educación y la cultura y tiene como objetivo construir, a través de estos valores, una sociedad activa, crítica, integradora y cívica. La importancia de su tarea radica en su trayectoria y su coherencia: impulsamos campañas de denuncia y sensibilización, eventos y proyectos culturales, de cohesión social y de educación.

La Sede Territorial del Barcelonès Nord se constituyó en 1968 y, actualmente somos 5.151 socios, de los cuales 3.594 somos de Badalona.

¿Vosotros desde cuándo sois socios? ¿Cuál es vuestro papel?

J: Yo soy socio de Òmnium desde hace 15 años y cuando me jubilé, ahora hará unos 5 años, me propusieron entrar en la Junta. Así que mi papel es ser miembro de la Junta y, además, estoy en la Comisión de la cohesión social, intentando crear complicidades con otros agentes del territorio.

C: Yo hace tres años que soy socio y participo activamente desde hace un año en la Comisión de futuro compartido. Lo que más me atrae es el ámbito social.

¿Con qué tres palabras definiríais la labor de Òmnium en la ciudad?

J: Yo diría que las que son generales: Lengua, Cultura y País. Queremos transmitir complicidades en todo el territorio de Badalona y no sólo centrarnos en el centro de la ciudad como antiguamente. Es por eso que estamos colaborando con otras entidades de la ciudad para conseguirlo.

¿Qué sueño teneis por Badalona?

C: Que sea una ciudad socialmente justa. Ahora mismo no lo es, a pesar de ser una ciudad muy rica en diversidad. Hay una cohesión social de todos los barrios, todo es Badalona. Para mí, lo más importante sería tener una Badalona cohesionada, seas del barrio que seas y seas de la nacionalidad que seas. El importante es de donde te sientas. Ya no es sólo la lengua, ni la cultura, sino de donde te identifiques, de donde perteneces. Ayudar a las personas de la ciudad a sentirse orgullosas de pertenecer a Badalona. El problema es que se ha creado como una frontera urbana entre el centro y el resto de barrios y eso tenemos que conseguir que desaparezca.

J: Sí, y también lo que buscamos como ideal de ciudad, es que haya igualdad de oportunidades tanto si eres nacido en un barrio como la Salut Alta, como si eres de un barrio más acomodado.

¿Nos podeis explicar algún proyecto o actividad vuestra que ayude a caminar hacia ese objetivo?

J: Actividades a nivel cultural se hacen muchas. Por ejemplo el conciertos de las noches de los Badiu, el Corellengua, la noche de las letras para Sant Jordi, el premio literario Sambori, la celebración de la Diada... Desde la Comisión de cohesión hicimos una ronda de encuentros con entidades, entre ellas vosotros, para que nos hagáis llegar qué necesidades teníais. Y una de las cosas que detectamos era que deseabais haceros más visibles en el centro de Badalona. Por eso, ahora tenemos el local nuevo en la Calle de la Mercè,  disponible por si alguna entidad quiere hacer alguna actividad. Por ejemplo, está la exposición de las Arpilleres del Ateneu Sant Roc.

C: Las Ágoras también son un espacio de encuentro muy chulo donde hablamos de todo el proceso político desde la base más emocional. Se reúnen personas con sensibilidades diferentes y lo que se busca es el punto de cohesión, de cómo te puedes sentir. Gente que políticamente piensa muy diferente pero que una vez nos escuchamos, encontramos que hay más cosas en común de las que nos imaginamos.

Diríais que Badalona es una ciudad rica en...

C: En humanidad y en diversidad de personas. Esto es una riqueza brutal y desde la Administración en estos años no se ha sabido gestionar. El potencial humano que puede haber en todo los colectivos diversos que hay en la ciudad es mucho. Quizás lo han intentado pero creo que todavía no se ha conseguido sacar provecho.

J: Para mí, Badalona también es rica en patrimonio. La Sierra de Marina, el litoral marino, Dalt la Vila...

¿Y cuál es la realidad de Badalona que más os preocupa, desde vuestra acción social y cultural?

Es muy preocupante la pobreza endémica y los problemas que pueden derivarse como son la vivienda. Esto hace mucho miedo porque con el confinamiento muchos desahucios se detuvieron y ahora han vuelto a reactivar y hay familias que lo pasarán muy mal. Y vemos que la respuesta de la Administración lo que hace es criminalizar esto en vez de abordarlo con más ayudas sociales para las personas que se están quedando sin recursos.

¿Qué relación os imagináis con las entidades del entorno?

J: Pues la que estamos intentando, encontrar temas de coincidencia y crear complicidades. Trabajando temas que nos interesen como son la lengua y la cultura y pensando en el proceso de la ciudad.

¿Con qué entidades tenéis más relación actualmente?

J: Estamos trabajando mucho con el Ateneu de Sant Roc, con vosotros y La Rotllana. Y nos gustaría irnos acercando paulatinamente a otras entidades como la Fundació Germina, el Centre Sant Jaume, ISOM y el Casal dels Infants.

Cierto. De hecho, este verano pudimos ofrecer a los niños y niñas que hacían el casal de verano con nosotros unas actividades diferentes con la ayuda económica de Òmnium y tuvieron mucho éxito! ¿Por qué lo hicisteis?

J: A raíz de la pandemia tuvimos que dejar de hacer actividades propias y decidimos ayudar a otras entidades de la ciudad para poder a cabo sus acciones. Así, al no poder ofrecer las actividades que teníamos programadas como cada año en la ciudad, decidimos ofrecer este dinero a otras entidades que hicieran casal de verano y así los niños disfrutarían de otras propuestas.

Cuando hablamos de Òmnium Cultural, mucha gente piensa sólo en política o en cultura catalana. En Badalona, ¿alguna vez esto ha sido un limitante?

Sí, puede que alguna vez. Pero somos una entidad que trabajamos, y nos gusta hacerlo, con entidades de todo tipo siempre que haya un respeto democrático. Hemos colaborado con Sindicatos, con Fampas, con Asociaciones de Vecinos y muchas entidades que no tienen ningún posicionamiento político.

En estos momentos con la pandemia, el ámbito cultural está muy tocado. ¿Qué se puede hacer desde Òmnium para reactivar este sector?

Todas las actividades de Òmnium están de una manera u otra relacionadas con la cultura. También las que son de tipo social intentamos que de una manera u otra estén. Por ejemplo, ArrelArreu es un proyecto de aprendizaje y servicio comunitario llevado a cabo con estudiantes de las aulas de acogida de secundaria. A través de un cuento de su país de origen, hacen un servicio al centro educativo y la biblioteca y, a la vez, consolidan el aprendizaje del catalán, se acercan a las técnicas de expresión de la oralidad y hacen una tarea de sensibilización intercultural.

Pero sí, es complicado porque el mundo de la cultura es muy presencial y todavía no hemos encontrado maneras de replantearlo. Ciertamente, con la pandemia tendremos que modificar la manera de trabajar pero manteniendo el mismo espíritu.

¿Cuál creéis que es el mayor reto para las entidades de Badalona en el momento actual?

J: Yo creo que es muy importantes para Badalona mantener las entidades como la vuestra, para luchar por una mayor cohesión social, para evitar que las personas se queden atrás. El reto que tenéis imagino que será mantener el nivel de ayuda y compromiso para las familias participantes y poder ampliar servicios. Y con Òmnium tendreis siempre la voluntad de colaborar en todo lo que podemos.

C: El tema es que si la Administración no está haciendo su función, vosotros os convertís en servicios esenciales porque sois quien cubre las necesidades básicas que la administración no está cubriendo a las familias. En el momento en que los servicios sociales no están funcionando, estáis vosotros supliendo lo que no hacen ellos. Y vosotros deberíais estar un nivel por encima y poder trabajar otros aspectos.

¿Qué papel tiene Òmnium Cultural?

J: Òmnium Cultural no es una entidad que haga este tipo de tareas que hacen las entidades. Nuestro ámbito de trabajo está ambientado en la cultura y la lengua. Y lo que hacemos es colaborar con otras entidades y escuelas, creando complicidades y así establecer nuevas sinergias.

Y, para terminar, ¿cómo les gustaría que fuera la Cataluña del futuro?

J: Independiente, con los valores de un país donde todo el mundo tuviera oportunidades y todo el mundo se sintiera incluido. Una Cataluña con igualdad de oportunidades.

C: Poniendo a la persona en el centro. Un país donde lo importante sea su valor humano.

Y, como entidad social, ¿qué papel tenemos?

Pues tal y como está la cosa, en estos momentos entidades como la Fundació Salut Alta sois necesarias e imprescindibles. Lo ideal sería que dejarais de existir, pero sois muy necesarios para ayudar a vincular territorios, a vincular personas. Y, todo ello, orientado hacia el tipo de sociedad en la que nos gustaría vivir.

Entrevista hecha por Lídia Solé

Recopilación de imágenes de la entrevista, de actividades del Casal de verano y de la grabación de vídeos donde hemos participado este curso: